La alimentación y la salud, tienen una estrecha relación. Qué, cómo y cuánto comemos influye directamente en nuestro organismo, pero no es lo único que debemos tener en cuenta a la hora de cuidarnos. Debemos tener una serie de hábitos saludables que incluyan además de la actividad física, la higiene, el descanso y las medidas de prevención que nos ayudan a sentirnos mejor. Cuidamos nuestra salud cuando:
• Come sano: No comas las cosas que sabes que te van a engordar como papas fritas, hamburguesas y dulces. Como diariamente alimentos que tengan muchas vitaminas y minerales tales como frutas, vegetales, granos enteros y productos lácteos sin grasa o con un contenido bajo en grasas. Ser moderados en las comidas y consumir menos calorías de las recomendadas. La dieta debe incluir alimentos antioxidantes frutas y verduras de colores vivos y cereales integrales. El pescado es preferible al consumo de carne.
• No dejes de comer. Realizamos las 5 comidas diarias. Jamás dejes de desayunar.
• Beber abundante agua. El agua es uno de los elementos naturales más importantes para el ser humano, sin agua, no existiría la vida. Nuestro cuerpo está formado principalmente de agua. Todas las células y funciones orgánicas del ser humano dependen del agua para su correcto funcionamiento
• Busca maneras de mover tu cuerpo. Caminar, subir escaleras, nadar, bailar, hacer ejercicios sencillos, jugar tenis, practicar yoga contribuyen a mejorar la sensación de bienestar. Si vives en un edificio sube por las escaleras y no por el ascensor, saca a pasear a tu perro, organiza excursiones con tus amigos, lo importante es realizar cualquier actividad que te mantenga en movimiento.
• Reír y ser positivos: ser alegres y tener la mente ocupada en pensamientos positivos es beneficioso para la salud. La mente ejerce un papel determinante en el buen funcionamiento del cuerpo humano. Las personas que saben reír, y que tienen sentido del humor enfrentan la vida desde perspectivas más creativas, con menos limitaciones, éstas personas sufren menos tensiones, envejecen más tarde.
• Ejercitar la memoria: Mantener una memoria activa favorecida nuestro bienestar. Leer, estudiar, realizar crucigramas, impiden que nuestra memoria se atrofie.
• Combatir el stress: estudios científicos han demostrado que existe una relación estrecha entre el envejecimiento y el stress. Elige al menos 30 minutos de tu día en hacer algo que te guste, por ejemplo jugar con tu mascota, mirar una película de humor, caminar por la playa o visitar o visitar a un amigo.
• Cuidar la higiene: un cuerpo limpio es un cuerpo sano. Eso incluye el beber alcohol con moderación, dejar de fumar y el no exponerte a contaminantes, busca lugares ventilados y libres de humo.
• Descansar lo suficiente: Pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo, unos 25 años aproximadamente. Sin embargo muchas veces no le damos la importancia que merece el descanso nocturno. Dormir bien ayuda a mejorar el estado de ánimo durante el día y por ende a vivir más y mejor.
• Vive para tí: Antes que nada tienes que saber que la persona más importante de tu vida, eres tú mismo. No dependas de las demás personas para ser feliz, porque la felicidad está dentro de uno. No bases nunca tus alegrías o tus tristezas en otra persona
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