AL DORMIR MENOS SE APRENDE MENOS

Pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo, unos 25 años aproximadamente. Sin embargo muchas veces no le damos la importancia que merece el descanso nocturno. Dormir bien ayuda a mejorar el estado de ánimo durante el día y por ende a vivir más y mejor. Es necesario al acostarnos poder disfrutar de un descanso reparador y levantarnos llenos de energía. Dormir bien mejora nuestra capacidad de atención, creatividad e incluso la memoria. Investigaciones recientes han demostrado una clara relación entre la cantidad y calidad del sueño con nuestro estado de salud y rendimiento escolar.

Cada vez más los jóvenes no tienen horarios, la televisión, el internet, los videojuegos, celulares y el número creciente de lugares nocturnos están transformando sus hábitos de sueño. De seguro, hemos visto en más de una ocasión a nuestros hijos con el celular bajo la almohada o entre las sábanas, chatean, escriben mensajes durante la noche, hasta el punto de convertirse en uno de los peores enemigos del descanso juvenil. Debemos sumarle a esto, que los jóvenes que han dedicado parte de las horas de sueño a comunicarse con amigos (facebook, twitter, Messenger, pin), al levantarse están cansados y todavía con sueño, ya retrasados se van a la escuela sin desayunar, lo que incide negativamente en el rendimiento escolar. En las primeras horas de clase los párpados se caen, la cabeza pesa y no importa el ejercicio de matemática o de física escrito en el pizarrón, solo se piensa en que esos ejercicios son un fastidio, que se está cansado y todavía faltan 16 horas para dormir. Un estudio realizado sobre 2500 estudiantes muestra que la mitad (50%) duerme menos horas que las recomendables para su desarrollo intelectual y su crecimiento e indica que en los fines de semana el porcentaje supera el 83%. Durante el fin de semana, tal vez los jóvenes si duerman sus 8 horas, pues muchos se acuestan a las 3 am pero se levantan casi al mediodía. El número de horas de sueño parece lo recomendable, pero no así su calidad, pues pierden horas de sueño nocturno que son fundamentales para el adolescente, porque están ligadas a cambios hormonales que influyen en su desarrollo y crecimiento.

DORMIR BIEN ES CUESTION DE HABITOS: para que nuestros jóvenes duerman bien, es necesario que su cuarto no sea una tienda electrónica. La computadora, el Ipod y la televisión no ayudan a conciliar el sueño y es mejor si están en otro lugar de la casa, si no se puede, manténgalos apagados. El joven debe seguir estos consejos si quiere tener un sueño reparador:

• Mantén una rutina, acuéstate siempre a la misma hora.

• Procurar dormir entre 8 y 9 horas por día.

• Acostarse en cuanto aparezcan los primeros signos de sueño.

• Toma un baño caliente, escucha música, lee un libro, esto ayudará a relajarte, dejar atrás el estrés y prepararnos para el descanso.

• Aparta tus preocupaciones personales, estudios, modas, fiestas, amores, antes de dormir, no dejes que ellos afecten tu sueño

• Regular tu alimentación, la cena debe ser temprano y ligera.
• Evita sustancias como el alcohol, la cafeína, la nicotina y los refrescos de colas que perturban considerablemente el sueño, sobre todo después de las 6 de la tarde.
• No usar la cama para comer, hacer tarea, hablar por celular porque de este modo el cerebro deja de asociar a la cama con el sueño o el reposo.

Recuerden que también debemos dedicarle atención a la alimentación la cual debe ser balanceada, no es alimentarte solamente de lo que le gusta, deben consumir además de carbohidratos, proteínas y minerales. Herbalife tiene un complejo vitamínico que proporciona las vitaminas y minerales que el cuerpo necesita, es una práctica manera de compensar las necesidades básicas diarias de nutrientes de los adolescentes. Contiene más de 20 vitaminas y minerales esenciales que ayudan al funcionamiento del organismo